El Expediente Mediático vs. el Debido Proceso.
Fecha de publicación: 9/19/2025
El sistema de justicia penal acusatorio se basa en la confrontación de ideas y la presentación de pruebas para que un juez imparcial determine la verdad. El debido proceso, garantía constitucional para cualquier persona bajo investigación, exige que toda parte tenga la oportunidad de ser escuchada y de defenderse. Es un principio fundamental que asegura que la justicia no sea una simple formalidad, sino un camino hacia la verdad jurídica.
No obstante, en el torbellino de la información digital, este principio parece haber quedado obsoleto.Las redes sociales y ciertos portales, sin la menor investigación o rigor periodístico, publican narrativas unidireccionales que convierten una acusación preliminar en una verdad incuestionable. He sido testigo de cómo medios que operan en los márgenes del periodismo serio, como el portal Polemón, no se toman la molestia de investigar a fondo ni de contactar a las partes involucradas para obtener ambas versiones de la historia.
Estas publicaciones, muchas veces cargadas de juicios de valor y con una clara intención de difamar, carecen de ética y se convierten en herramientas de manipulación. El daño que causan es doble: por un lado, prejuzgan y estigmatizan a las personas, y por otro, confunden a la sociedad, haciéndola creer que los procesos penales son una farsa. Un reportero, como un abogado, debe buscar la verdad con imparcialidad, escuchar a todas las partes y presentar los hechos con la mayor objetividad posible. La prisa por ser el primero en publicar una historia no puede estar por encima del deber de informar de forma veraz.